Por
Hugo Neira Sanchez
A
todos los colombianos la prensa
principal de Colombia cuyos dueños son
los grupos económicos más poderosos del
país, quienes nos están llevando a una
dictadura económica, pues ejercen un poder o un lobby tan poderoso en
el Congreso y, en muchos funcionarios públicos
nombrados por voto popular, en contraprestación con la financiación amplia de sus campañas políticas como lo
hace laAsociación de los Estados Unidos
(NRA) La Asociación Nacional del Riflemuy controvertida en este momento por el asesinato
cometido en la escuela pública de Connecticut,nos han informado “amañadamente” que el tratamiento
del señor Petro con el problema de las basuras en Bogotá, es insensato, irresponsable
etc., y que volvemos a los años en que
los sindicatos hicieron de las suyas, donde fueron corruptos, mal servicio
y quebraron por sus exigencias a estas
Empresas. Esto realmente son medias verdades.
El
sindicalismo en Colombia, comenzó en los Artesanos en el siglo XIX, un sinnúmero
de personas que ejercían numerosos oficios desde fabricar calzado rustico,
hasta ropa que usaba la mayoría de los habitantes, se introdujeron en la
política por necesidad, ya que su trabajo que en muchos países sirvió de base
para la era industrial, aquí no se pudo, pues los gobiernos “democráticos” que
llegaron después de Santander, con un espíritu renovador y con fobia a todo
impuesto creado por los españoles,
eliminaron estos impuestos que existían no por necedad sino por necesidad y, se
efectuó una disminución de los recaudos, teniendo la enorme deuda de nuestra Independencia, que
fue una de las razones de las desavenencias entre Santander y Bolívar. Santander
era como decimos “tacaño”, mientras Bolívar con sus ansias libertadoras “manirroto”.
Solo quedo para recaudar y pagar con las “minas de sal” que
ya estaban empeñadas y los recaudos aduaneros. Con el cuento del “laissez-faire” y el
deaumentar este recaudo se necesitóimportar más mercancías, esto
tuvo como consecuencia traer toda clase de mercancíasque perjudicaba a los
Artesanos, aumento este recaudo y, dejo felices a muchos políticos colombianos que eran
comerciantes importantes.
Los
Artesanos con la perdida política y económica no vieron otro camino sino de
apoyar el “golpe de estado” de Melo, además de efectuar el “primer Bogotonazo” por
su dignidad en el año 85, pero como le pasan a los que no son de alcurnia
terminaron en las mazmorras insalubres en Panamá, donde nunca volvieron y en
donde imperaba la fiebre amarilla, mientras los principales fueron indultados,
allí se cumple el dicho en Colombia; que la ley es para los de ruana.
Después
de todo esto, reaparecen en el siglo XX como Sindicatos en el gobierno de LópezPumarejo, y van fortaleciendo
su poder. Sinceramente si no fuera por el Sindicalismo, no habría salario mínimo,
ni jubilación tantas garantías que ha
ganado los trabajadores. Generalmente los dueños de capital no son “dadivos”- El
Sindicalismo hasta donde llego y consiguió no lo hizo solo, mucho lo hizo con la gente dirigente, pues
esto les permitió a muchos de ellos hacer corrupción sin acuse alguno.
Con
el problema de las basuras de Bogotá, se vuelve a revivir lo que predica el
Neoliberalismo, que el ente público sea solo un árbitro amarrado, sin intervenir
en nada en los servicios públicos, pues ellos no son corruptos, que mentira tan
grande hasta ahora el sector privado ha ganado las medallas de corrupción desde
los Nule hasta ahora el problema de InterBolsa, afectando a todos. Son casos tan patéticos, que nos
sentimos indefensos, como el caso deElectrolima es vendida solo presentado la
cedula, sin tener en cuenta a los usuarios, ni a la región, por ser amigo como
lo ha confesado del próximo presidente Lleras, pues financia su partido político,
a quien se le ha pedido que se inhabilite en el asunto de las basuras. Hacer
capital a costillas de los usuarios, es el mejor afiche del Neoliberalismo, sin
retribución alguna.
De
las basuras se ha dicho es “dinero”, por eso están estos pulpos económicos,
pagando sueldos malos, sin retribución a Bogotá, están decididos a usar todas
las armas que cuentan: chuzando, calumniado, usando funcionarios públicos, para
que busquen todo lo posible para tumbar la idea de Petro. Realmente es escandaloso
lo que hacen, mientras el señor
presidente quien ha manifestado apoyo a Petro, no dice ni pio. Este doble juego
que ha tenido el señor presidente lo va hundir para su reelección, pues la
reforma tributaria por ejemplo está llena de contribuciones a la clase media y
trabajadora, lo cual no hay forma de
ocultarla, como lo último que se descubrió después de 2013; la salud que estaba
pagando los empresarios y trabajadores,
quedara el trabajador pagándolo totalmente, y se le ira por el caño el aumento
de su salario mínimo.
Los
que tienen miedo de que el Sindicalismo vuelva con su canibalismo económico,
creo que no, pues primero la acumulación de pasivos laborables, una de las
causas principales de la quiebras estatales, ahora no sucederá,pues cada
empresa abonara esos haberes en empresas dedicadas a esto según la ley cada año, y serán jubilados por
estas, por otra parte los trabajadores tendrán mejores empleos, estables, no sujetos a los cambios neuróticos de cada
jefe y, su dignidad humana le alcanzara
para no volver repetir el pasado. Creo sinceramente es otro tiempo. El
Neoliberalismo es un ataque a la dignidad humana. Los gobiernos se nombran para
que no solo sean árbitros, sino que intervengan a defender a los más indefensos,
pues los de arriba se defienden solos, esto se lo impide el Neoliberalismo.
Bogotá tiene todo el derecho de construir una Empresa como EPM. Cono dice la
propaganda, y se les puede decir a los contrincantes del alcalde Petro: por
favor “Jueguen Limpio”