Por: Alberto Bejarano Ávila
Señor Presidente del H. Concejo Municipal, Señor
alcalde. En tiempo no lejano y acatando conductos regulares sugerí a ustedes y
sus antecesores varias iniciativas sin obtener siquiera acuse de recibo. Ahora,
abiertamente, esbozo dos propuestas cuyos objetivos son: crear contrapesos al
poder corporativo para que el ciudadano no sea más vulnerable e indefenso
“trompo de poner”, aclarar la perspectiva financiera del inmediato futuro de
Ibagué y, por efecto colateral, ayudar a enmendar esa aberración del orden del
sentido democrático que hace ver como normal que las personas deban velar por el
éxito del político y su partido y omite que los políticos y sus partidos son
los obligados a velar por el progreso comunitario. Estas iniciativas, en el
poco probable evento de ser aceptadas, obviamente tendrían que ser ampliadas y
discutidas en escenarios diversos.
Propuesta 1: ASOCIACIÓN DE USUARIOS DE SERVICIOS
PÚBLICOS. Es odioso el contraste entre
el omnímodo y creciente poder corporativo de las empresas de servicios públicos y la vulnerabilidad, indefensión y falta de información del ciudadano. Cuando se produce abuso tarifario, mala calidad, revisiones ilógicas y otros actos unilaterales e inapelables, se hace palmario el silencio y desidia de los órganos de control y apenas si se escucha una débil y fugaz voz de política casual, más no hay quien, metódicamente, encare situaciones y aporte soluciones en favor “del matriculado”. Así ha sido y seguirá siendo si la sociedad civil no gana capacidad de análisis, denuncia y negociación para equilibrar de modo consistente y justo poder ciudadano con poder corporativo.
el omnímodo y creciente poder corporativo de las empresas de servicios públicos y la vulnerabilidad, indefensión y falta de información del ciudadano. Cuando se produce abuso tarifario, mala calidad, revisiones ilógicas y otros actos unilaterales e inapelables, se hace palmario el silencio y desidia de los órganos de control y apenas si se escucha una débil y fugaz voz de política casual, más no hay quien, metódicamente, encare situaciones y aporte soluciones en favor “del matriculado”. Así ha sido y seguirá siendo si la sociedad civil no gana capacidad de análisis, denuncia y negociación para equilibrar de modo consistente y justo poder ciudadano con poder corporativo.
La idea concreta es que el H. Concejo municipal y
el Sr. Alcalde, en asocio con instancias de inequívoco sentir ibaguereño,
promuevan la creación de la “Asociación de Usuarios del Servicio Público”, ente
financiado por el Municipio, contribución fija de cada ESP y un aporte de 500
pesos mes por usuario, quien, debemos creer, no rehusará pagar 6 mil pesos año
en su recibo de agua para proteger su peculio de abusos y contingencias. Esta
Asociación realizará anualmente una asamblea autónoma que elegirá la junta
directiva que, a su vez, contratará funcionarios, técnicos y doctos en leyes y
normativas atinentes, editará boletines periódicos, creará su página web y
usará métodos modernos para capacitar, informar y defender indistintamente a
todos los usuarios.
Propuesta 2: EVALUACIÓN ECONÓMICO-FINANCIERA DEL
MUNICIPIO. Muchos hemos de admitir que ni mú sabemos sobre las finanzas del
Municipio de Ibagué y por ende que ignoramos cuál ha sido el desempeño fiscal,
digamos, del último lustro y cuál su proyección financiera para el próximo. No
sabemos si vamos bien, estamos estancados o vamos mal en disponibilidad de recursos
para financiar infraestructura e inversión social y, así, cuanto se diga o
prometa no puede sustentarse y sí puede ser palabrería insulsa. ¿Cómo crece el ingreso
propio y las transferencias? ¿Cómo se manejan las exenciones? ¿En que se
invierte el célebre préstamo de 100 mil millones? ¿Cómo impactará el costo y el
servicio de esa deuda en los próximos cinco años? Estas incógnitas y otras más
deben despejarse para que la comunidad esté plenamente consciente de su situación
y, en serio y sin engañifas, sepa para donde va y que le espera en los años
venideros.
Propongo que la Alcaldía, con veeduría de “Ibagué,
cómo vamos” y la Cámara de Comercio realicen, para la sociedad ibaguereña, un
juicioso estudio económico-financiero para precisar, en valor presente, cuál ha
sido el comportamiento fiscal del Municipio desde el 2009 al 2013 y cuál es el
pronóstico para el 2014-2018. Estos lapsos abarcarían una administración pasada,
una presente y una futura y las cifras aportarían valioso acervo de criterios
para informar elecciones futuras.