PERIÓDICO EL PÚBLICO
Ortega (Tolima) fue la primera población “pitufa”, en el mundo.
Por: Hugo Neira S
Para los que no conocen que son los pitufos, estos son pequeños personajes azules de dibujos animados, simpáticos comelones de setas, que las han cambiado  por Júzcar  pueblo pitufo en España por la  multinacional Sony Pictures, que lo escogió para promocionar la película “Los pitufos 3-D”, que se estrenará en agosto en España.
Con el anuncio mundial que el primer 'Pueblo Pitufo' del mundo está en el pueblo malagueño de Júzcar, situado en la Serranía de Ronda, Málaga, España, podemos decir con razón que esto no es cierto, pues el primero fue Ortega (Tolima), en la década de los cincuenta del siglo pasado en plena violencia, donde fue nombrado alcalde un sargentòn peor o igual que cualquiera los paramilitares de hoy,  para que hiciera sangrientas jornadas punitivas contra los inocentes labriegos liberales que poblaban las veredas de Ortega, no solo no se contento con esto, sino con sus ideas sectarias obligo pintar todas las fachadas de las casas del pueblo en color azul metileno, parecido hoy al de Júzcar, pero en Ortega este “macondo” tolimense pequeño, fue tanto  lo que quedo en la tradición  del pueblo,  que cuando se pedía en los almacenes un tarro de pintura “Cecilio”,  todos ya conocían que pintura era la que pedían, pues Cecilio Hernández se llamaba este asesino, no sé si todavía vive, pues había sido un candidato ideal  para un tribunal internacional de justicia, por crímenes atroces contra la humanidad, pero como todo sucedió en Colombia acabo en perdón y olvido, sin consecuencia alguna. Para este personaje,  el  trofeo de guerra que le exigía a sus subalternos, para ascensos y premiación, eran las orejas de estos pobres labriegos. Vi personalmente a la llegada de estas giras sangrientas, al tratar de rescatar un caballito, muy apreciado por mi persona con mi padre, el cual había sido confiscado para una de estas jornadas, pues por esto  contemple la llegada de este grupo de  asesinos, con mochilas que les colgaban en las sillas de montar llena de orejas, cuya impresión de “rabia, injusticia y frustración” de no poder hacer nada,  todavía la llevo después de tantos años. 
Por otra parte me llamo la atención que este primer pueblo pitufo, como manifiestan de España, fue pintado todo de azul, 175 inmuebles entre ellos la Iglesia, cementerio y ayuntamiento, donde utilizaron 9.000 litros de pintura, con consentimiento de toda la población,  diferente al de Ortega, el cual fue arbitrario y un producto de la guerra absurda desigual entre liberales y conservadores, cuya política y resultados a los campesinos no les representaba nada, pero si les causo muertes, desplazamientos y miseria, mientras los arriba azuzaban sin comprometersen y resolvían sus diferencias en cocteles y en asilarse “lavándose las manos·.
Júzcar o el 'Pueblo pitufo' se ha convertido en el pueblo de los pequeños seres azules que viven y forman parte de la naturaleza y promueven el respeto y el cuidado por el medio ambiente.
Sera necesario pintar otra vez a Ortega, con un objetivo más noble para las generaciones futuras, de reconocer que somos parte de la naturaleza y debemos cuidar el medio ambiente¡