PERIÓDICO EL PÚBLICO
La economía peruana ante las incertidumbres electorales

Las encuestas para la segunda vuelta de las elecciones peruanas reflejan un empate técnico entre los dos candidatos a hacerse con la presidencia del país. En cualquier caso, las elecciones parlamentarias han dejado una cámara dividida gracias a un voto muy fragmentado.

Si analizamos las implicaciones económicas para Perú, economía en la punta del crecimiento mundial y latinoamericano en la época de Alán García, ya están siendo negativas, el sol está perdiendo valor frente a otras divisas p.e. el euro que a principios de año cotizabaa 3,60 y ya se sitúa por encima 4 (aunque haya caído por las dudas griegas desde niveles cercanos a 4,3). Una divisa débil a pesar del excedente comercial y del crecimiento indica una clara incertidumbre sobre el futuro... tal vez incluso una falta de confianza.

Existen también dudas de si un presidente, gane quien gane, que será rechazado por una parte importante de la población, podrá gobernar de manera eficiente con un parlamento tan dividido, esta incertidumbre debería traducirse en retrasos en la inversión, sobre todo extranjera.

Del mismo modo, la política económica, sobre todo de Humala, del futuro presidente es toda una incognita porque la campaña electoral se está moviendo por otros parámetros... Humala se está esforzando por mostrarse como un moderado de izquierdas al estilo de Lula, pero muchos ven la posibilidad de un neochavismo o una política próxima a Correa y la inversión extranjera se retrae...

En cuanto a Keiko, la posibilidad de nuevos escándalos parecidos a los acontecidos en la época de su padre y el favorecimiento de una determinada clase de privilegiados combinada con una política excesivamente neoliberal aparecen también como factores de dudas...

En suma, el elector que pensase en la economía peruana estaría entre elegir lo malo o lo peor (entiéndase la metáfora) porque lógicamente el mercado reaccionará de una manera poco benévola con independencia de quien gane. Es necesario que el nuevo presidente se "gane" a los mercados como p.e. hizo Lula en los primeros meses tras su elección, y no fue tarea fácil.

Gane quien gane, lo importante es que consiga que Perú mantenga su ritmo de crecimiento para generar un mejor reparto de la riqueza.
Publicado por IFRYDHE S.L.N.E.- www.ifrydhe.es