Por:
ALBERTO BEJARANO ÁVILA
Cualquiera
podría construir visión de futuro, pero sólo personas excepcionales construyen
futuro real, digno y justo. Con base en esta inferencia uno diría que
historiadores, analistas y todos nosotros debemos juzgar con rigor los hechos
socioeconómicos más relevantes acaecidos en tierra ibaguereña desde “tiempos de
upa” hasta la época actual y así revelar perspectivas de tiempo y espacio que
permitan ver, con ecuanimidad y sin especulación, cómo va Ibagué. El sentido común
dice que la ausencia de resultados es indicio de ir mal mal y la evidencia
cierta de estos señal de ir bien, claro, si todo resultado es tangible,
comparable, medible y sustentable y